Ganar Totana Izquierda Unida ha exigido la dimisión inmediata de la concejala de Urbanismo, Patricia Corbalán, tras la controversia por la instalación de una antena de telecomunicaciones a menos de 10 metros de las viviendas en la urbanización La Charca. En una rueda de prensa celebrada en su sede, el portavoz Pedro José Sánchez acusó a la concejala de Urbanismo de ocultar información, firmar documentos sin leerlos y engañar a los vecinos con declaraciones “falsas y contradictorias”.

La antena: un expediente "rodeado de opacidad"

Según explicó Sánchez, el expediente para la instalación de la antena comenzó en mayo de 2023, con la primera firma política en julio de ese año, cuando la concejala de Urbanismo suscribió un informe de subsanación de deficiencias. La licencia urbanística se concedió en octubre de 2024, casi un año y medio después. A juicio de Ganar Totana, en ese período el Ayuntamiento tuvo tiempo suficiente para informar a los vecinos, negociar con la empresa promotora o explorar ubicaciones alternativas, pero “no hicieron absolutamente nada”.

Los residentes descubrieron la antena cuando comenzaron las obras, lo que desató protestas y una reunión vecinal en un restaurante cercano. Allí, según Sánchez, dos miembros del equipo de gobierno admitieron no haber leído los documentos firmados, justificando que confiaban en los técnicos. “Es inaceptable que el alcalde cobre 200 euros por cada Junta de Gobierno y reconozca que no lee lo que firma”, denunció Sánchez, subrayando la falta de diligencia política.

Cuestionando las declaraciones del equipo de gobierno

Ganar Totana cuestionó las declaraciones de la concejala de Urbanismo, quien afirmó que la ubicación de la antena era conocida desde 2019. Mostrando documentos oficiales, Sánchez aclaró que el plan de implantación de ese año solo definía un área de búsqueda de 4 km de radio, sin una localización concreta. “Decir que se sabía dónde iba la antena es una mentira”, afirmó.

La concejala también lamentó la inexistencia de una ordenanza municipal para regular antenas, pero Ganar Totana señaló que dicha ordenanza existió desde 2001 hasta su anulación por el Tribunal Supremo en 2014, que falló a favor de las compañías telefónicas. Desde entonces, la normativa local se adaptó a las limitaciones legales, permitiendo antenas de hasta 30 metros en suelo rural, aunque en este caso la antena de 40 metros fue autorizada por un organismo estatal, como establece la legislación.

Propuesta de protocolo: “una excusa más”

Sánchez criticó la reciente propuesta de la concejala de crear un protocolo para que los funcionarios alerten sobre expedientes sensibles. “El técnico ya envió el documento en julio de 2023 para que lo leyeran y firmaran. ¿Ahora quieren que los funcionarios hagan también su trabajo político?”, cuestionó, calificando la medida como un intento de desviar responsabilidades.

Un punto de inflexión

Ganar Totana considera que el caso de la antena marca un punto de inflexión en la legislatura. Exigen la dimisión de la concejala de Urbanismo y un cambio en la gestión del PP, al que acusan de culpar a la oposición de un supuesto bloqueo institucional. “No negocian, no están donde tienen que estar y mienten sistemáticamente. O rectifican, o cada minuto que pasa es un minuto que pierde Totana”, concluyó Sánchez.